La propiedad de una lancha rápida es una inversión financiera. Y el costo de una embarcación es algo que debes considerar seriamente. Para el personal afortunado, esto podría no ser un problema. Pero no todo el mundo es tan afortunado o bendecido. El precio es quizás el principal problema de la mayoría de las personas que quieren pagar por una artesanía. El costo de una unidad puede hacer que alguien quiera tener un bote. Y dado que las lanchas rápidas se comparan con frecuencia con los autos deportivos debido a su precio (y funcionamiento), debe analizar cuidadosamente si poseer un bote es realmente para usted.
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¿Puedes pagarlo?
El precio del barco real es una cosa, los costos que seguirán a partir de entonces es otra. Después de adquirir un barco, las personas deberán preocuparse por los otros costos de propiedad, incluidos el combustible, el seguro, las reparaciones, el transporte, los impuestos y el mantenimiento. Si bien puede decir que puede pagar el costo del barco, tenga en cuenta que la gran parte de los gastos se produce durante el momento de la propiedad.
¿Estás cerca del agua?
No hay nada de malo en comprar un barco siempre que tenga un lugar para usarlo. Sin embargo, no vale la pena tener un bote si tienes que conducir 100 millas para llegar a las aguas más cercanas. Y no tiene ningún sentido si el precio de transportar su bote a las aguas está más allá del propio bote. A menos que viva cerca de las áreas costeras o estanques, tener un bote no es una buena idea.
¿Tienes tiempo para pasear en bote?
La propiedad de una lancha rápida no es simplemente una inversión financiera, sino también una inversión de su tiempo. Si bien es bueno tener una actividad de ocio de vez en cuando, aún debe evaluar si el tiempo que puede pasar con su bote realmente vale la pena. Si cree que no puede dedicar mucho tiempo a la navegación que sea digno del precio, entonces piense en el alquiler de embarcaciones. Es posible que no sea un propietario orgulloso de la embarcación, pero aún así obtiene una satisfacción similar sin romper su banco comprando una embarcación, su mantenimiento y el costo de remolque. Además, no tiene que preocuparse por la depreciación, el seguro, la memoria y la seguridad.
¿Sabes nadar?
Si bien esto es lo mínimo que debe preocuparle, ya que los chalecos salvavidas pueden estar a su disposición en cualquier momento, vale la pena mencionarlo. Al ser propietario de un barco, debe saber, como mínimo, la forma de nadar y la forma de realizar operaciones básicas de seguridad y emergencia. De esta manera, si sucede algo malo mientras usted, sus parientes cercanos o sus amigos están a bordo, existe una mayor posibilidad de que todos sobrevivan.
¿Te das cuenta de la forma de mirarlo?
Al igual que tener un automóvil, es esencial tener un mínimo de las habilidades necesarias para el mantenimiento del bote para que cuando su bote se descomponga en el corazón del agua y no haya ayuda disponible, sea capaz de arreglarlo en lugar de nadar hasta la orilla. para llegar a casa. La confianza de que puede arreglar su embarcación siempre que surja la necesidad es como saber nadar a pesar de la presencia de un chaleco salvavidas.
Además, saber cómo cuidar su barco prolongará su vida útil y mantendrá alto el valor de reventa.
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